Noam Chomsky: ¿héroe o villano?
Uncle Noam is the day of your birth, uncle Noam, uncle Noam, uncle Noam. [1]
Y esta que aquí arriba presento es la razón por la que al ver la propuesta de ensayo sobre la figura de Noam Chomsky, me decidí a redactarlo.
Mi primer contacto directo con él no fue el habitual: al contrario que muchos compañeros de carrera, yo no he tenido clase con ningún profesor de Lingüística de tintes chomskistas. Ni antes ni después de ese primer contacto del que ahora hablaré. Es un autor citado en clase numerosas veces, pero la mayoría, como ya digo, en mi caso, ha sido para hacer referencia a citas u observaciones suyas, a la vez contrapuestas a las ideas de otros lingüistas. La figura glorificada de Chomsky no es la que llegó a mí, desde luego.
La primera vez que oí su nombre fue en el primer curso del grado, en la asignatura de Lingüística General, impartida por Juan Pablo Mora. Nos presentó el documental El código de la Amazonia [2], que vi en casa. Me empapé dela polémica entre Daniel Everett y esta figura hasta entonces desconocida para mí, llamada Noam Chomsky. Recuperamos este documental en el siguiente curso, en la asignatura de Lenguas del Mundo, impartida por Francisco Salguero.
Para hacerse una idea hay que imaginar que la primera vez que escuchas el nombre de alguien, es como un lingüista muy importante e influyente (eso sí), cuyas teorías, tan aceptadas, tan poco discutidas, tan sacralizadas, se ven contrariadas por un profesor de lingüística estadounidense que, por circunstancias de la vida, termina estudiando un lenguaje llamado pirahã, en un pueblo del Amazonas. Los avances en los estudios de este profesor se ven obstaculizados por la figura de Chomsky y sus discípulos con tal del proteger sus postulados. Muy chomskista no me sentía yo en aquellos momentos: me parecía soberbio y con incapacidad de autocrítica. Así que no volví a hacerle caso. Hasta que años más tarde...
Carteles por todas partes, el tráiler donde mirases, salía en la televisión, las críticas de los periódicos. No haber visto Captain Fantastic parecía estar totalmente fuera de este mundo. Así que fui al cine. Y me gustó. Tenía cierta mezcla entre ilusión ingenua y desencanto, entre rebeldía juvenil y conformismo maduro. Era una película agridulce: unos padres que deciden criar a su familia lejos del sistema y aun así educarlos bien formados, inquietos, lo mejor que saben. Y en una de las escenas... como veis en el vídeo, esta familia, atea, no celebra la Navidad. Hasta ahí, nada raro. ¡Pero en su lugar celebran el día de Noam Chomsky! Tienen un cartel con su cara y le cantan canciones, y lo llaman luchador contemporáneo y dicen que ha luchado por promover la comprensión y los derechos humanos. La película era interesante a muchos niveles, pero a mí ese detalle me hizo salir de la sala a cuadros. ¡¿Noam Chomsky un héroe?! Así que hice lo que cualquiera habría hecho en mi lugar: abrir Google. Y esto es lo que descubrí:
Para empezar, Chosmky y su gramática generativa y universal son herederos de los académicos Modistae de la Edad Media y de la escuela francesa renacentista Port Royal. Se le describe como un pensador, y de hecho se relacionan sus teorías lingüísticas con filósofos racionalistas como Descartes contrastados con otros pensadores británicos. Y de aquí pasamos a su faceta política: implicado con ella desde pequeño, con el referente de la Barcelona presentada por George Orwell en Homenaje a Cataluña, más tarde parte del movimiento antibelicista, crítico con las políticas de EEUU... Incluso se habla de Noam como un lingüista que revisa sus propias teorías con el mismo vigor con el que ataca las de otros. Mi sorpresa era mayúscula [3].
También pregunté a otros compañeros que estudiaban lingüística en este u otros grados por la figura de Chomsky y los resultados eran los mismos: figura vanagloriada. Así que cuando escuché las palabras de Joe Emonds no me sorprendió en absoluto que lo describiese como un venerable héroe que había revolucionado no solo el campo de la Lingüística sino el de la Psicología y otras ciencias sociales. Noam C. como renovador de toda la concepción del estudio de las lenguas: destrona las teorías tradicionales basadas en la recogida y el estudio de datos. Amplía campos de conocimiento... Nada nuevo bajo el sol.
Y entonces llego a Tom Wolfe. Siendo crítica, encuentro irónico que se burle de la figura del lingüista (perdón, pensador) llamándolo Noam Charisma cuando, si algo hace su libro atractivo es la personalidad de su escritor, quien arremete contra todo el que le parece con un sarcasmo mordaz y un humor agresivo. Pese a todo, ver comparado tan satíricamente a N. Chomsky con un investigador marciano llegado a la Tierra para devolver a los lingüistas a la comodidad de sus despachos con aire condicionado y alejarlos del incómodo trabajo de campo, es una lectura divertida. Fundamenta sus opiniones contrarias a Chomsky ridiculizando su teoría del "órgano del lenguaje", apoyándose en el trabajo ya mencionado de D. Everett y reprochándole haber desarrollado sus teorías demasiado joven y sin salir del despacho. Pretencioso y autoritario es el Chomsky que nos presenta en su libro este periodista. [4]
Llegados a este punto: ¿Es Noam Chomsky un héroe por haber revolucionado no uno sino varios campos de estudio? ¿Son sus teorías sobre el lenguaje si no ciertas, perdurables? [5] ¿O por el contrario su figura ha perjudicado el estudio de la lingüística por sus intocables teorías? ¿Ha dificultado su influencia el avance en el estudio de las lenguas? Como con cualquier figura polémica, la respuesta siempre será pensar que es un personaje gris. Con sus luces y sus sombras. Revolucionario, pero conservador. Comprometido, pero inaccesible. Abierto e irrebatible.
[1] Captain Fantastic, Matt Ross, (2016).
[2] El código de la Amazonia, La noche temática, La 2, (2013).
[3] Teresa Galarza, ¡Feliz cumpleaños, Noam Chomsky!, JotDown Magazine, 2016).
[4] Tom Wolfe, The Kingdom of Speech, (2016).
[5] John Horgan, Is Chomsky's theory of language wrong?, Scientific American, (2016).
